La exposición necesita un momento de preparación para que el expositor planee qué información se va a dar a conocer y qué herramientas son necesarias para la presentación final. Estos son sus pasos:
1. Determinar un tema de interés y un propósito con relación al tema.
2. Documentarse sobre el tema escogido.
3. Seleccionar la información.
4. Planificar lo que se va a decir.
5. Redactar esquemas de resumen.
1. Determinar un tema de interés y un propósito con relación al tema
En este primer paso debes escoger con claridad de qué vas a hablar y tener en cuenta las personas que te van a escuchar para escoger el pro- pósito de la exposición.
Por ejemplo, si estás en clase de ciencias naturales y el profesor te solicita que hagas una exposición sobre la célula, este es el tema. El propósito surge de tus intereses y de los del público, así que puedes tener en cuenta los conceptos que le están causando dificultad a tus compañeros y que tú comprendes.
Así, puedes tener como tema y propósito:
Tema: La célula y sus partes.
Propósito:
Explicar de forma clara, la información sobre la célula y sus partes para comprender mejor su funcionamiento y estructura
La claridad sobre el tema y el propósito te permitirá realizar los pasos siguientes.
2. Documentarse sobre el tema escogido
Esto implica que debes acudir a las distintas fuentes de conocimiento que puedan aportar a la exposición: libros, revistas, periódicos, entrevistas a personas que manejan el tema, internet, etc.
Buscar la información implica determinar qué textos te pueden servir para hablar del tema que escogiste, si acudes a la biblioteca, observarás que generalmente está organizada por áreas de conocimiento, así, si el tema es la célula debes buscar en el área de ciencias naturales o biología.
Una vez encuentras los libros del área empieza la búsqueda de la información específica a través del índice o tabla de contenido que se encuentra al inicio de los libros y que contienen la lista de temas que se abordan de manera ordenada. Aprender a utilizar este recurso es muy importante para la búsqueda de información en los textos.
Si estás buscando aspectos relacionados con la célula, por ejemplo, y encuentras el libro titulado “El mundo de la biología”, puedes consultar en la tabla de contenido:

En la tabla de contenido, la Unidad 2 está dedicada a la célula y uno de sus capítulos aborda, específicamente, “Las partes de la célula” que es el tema de tu interés y aparecen las páginas en las que se encuentra la información. Es necesario consultar varias fuentes, ya que es importante contar con toda la información necesaria para cumplir con el propósito y también porque es posible que un aspecto que no sea claro en un texto lo sea en otro.
3. Seleccionar la información
Es necesario analizar y organizar la información que se extrae de las fuentes, así podrás escoger la que te sirve para cumplir con el propósito de la exposición y te ayudará a darle un orden lógico a la presentación.
Para seleccionar la información puedes elaborar fichas bibliográficas, en las que resumas el contenido de lo que has leído o extraigas las ideas más importantes:

Una vez tengas una idea clara de los
contenidos que te brinda cada fuente y cómo aportan a tu propósito, puedes
escoger los que son un aporte significativo y los que no, para tu exposición.
4.
Planificar lo que se va a
decir
En este paso se construye una estructura
del contenido de la exposición y se diseñan los materiales gráficos de
apoyo. Esto implica que después de
revisar la información, sacar las ideas más importantes y organizarlas. No
olvides tener en cuenta el tiempo establecido para tu intervención.
Dentro de los recursos que puedes utilizar
en la exposición están las carteleras, en tanto te permiten explicar mejor el
tema ya que contienen las ideas claves e imágenes alusivas.
Un ejemplo de cartelera para el tema que
vas a abordar podría ser el siguiente:
LA CÉLULA
PARTES DE LA CÉLULA

5.
Construye un esquema donde se resuma lo que se va decir en la
exposición
Con el fin de
tener en cuenta la estructura que has planeado, puedes realizar un esquema que marque
la ruta de desarrollo del tema, ya que es importante que selecciones una
estrategia que te permita recordar el contenido y darle un sentido lógico. La información
que incluyas en el esquema te permitirá recordar palabras o definiciones claves
sobre el tema a presentar.